Holocausto Caníbal o la Odísea de Deodato.

Hoy voy ha hablaros de una película de la que he oído hablar mucho pero la cual no he visto nunca, por lo que me voy a abstenerme a hacer una crítica de ella, ya que sería absurdo sino comentar la polémica que creo este filme en todo el mundo y la odisea que supuso “Holocausto Caníbal” para su director, Ruggero Deodato.

La película nos narra las vivencias de un grupo de documentalistas en la selva amazónica en busca de una tribu caníbal. Durante el viaje pierden a su guía (un día debería hablar de los guías y porteadores, esos grandes damnificados del cine de aventuras) tras caer enfermo por una picadura de serpiente y es así que continúan su camino haciendo el cabra hasta que llegan a encontrarse con dichosa tribu. Primero observan un brutal castigo que sufre una mujer adultera que es condenada a la empalación esto da píe a que algunos de los documentalistas crean que los caníbales no son más que unos meros animales y comienzan a vejarles y a someterles a todo de humillaciones mientras comienzan a masacrarles con su armamento, pero a diferencia de la mala leche la munición no es infinita. Por otro lado un tipo de la Universidad a la cual pertenecían los buenos mozos va a Colombia a recoger los enseres que el ejercito ha encontrando y los devuelve a su país, una vez allí alguien decide que las emisiones sean emitidas por televisión, es así como empieza un acalorado debate sobre sí es lícito emitir esos videos y respecto el comportamiento de los jóvenes y difuntos protagonistas.

La película es una coproducción entre Italia y Colombia de 1980 y es tal vez la película que haya sido censurada en más países del mundo, a pesar se estrenaría en formato domestico en todos ellos. La película pasó sin pena ni gloria ante los ojos de todo el mundo hasta el día del preestreno del filme en Bogotá, allí un técnico colombiano que había participado en el rodaje afirmó ante los medios que gran parte de las escenas eran reales e incluso mataron a varios indígenas para hacer la película más real. Tal fue el revuelo que causó que la película no se pudo estrenar esa noche y el director de la película tuvo que falsificar su documentación para poder huir a Cartagena de Indias y posteriormente a Miami. Pero eso no fue más que el principio de su pesadilla.

Una vez en su Italia natal fue arrestado por la policía italiana acusado de causar varios homicidios, ya que un juez consideró que la cinta contenía imágenes reales teniendo Deodato que llamar a algunos actores que supuestamente estaban muertos para declarar a su favor. Una vez absuelto la leyenda urbana se extendió hasta España, allí la publicación Interviú daba a entender que todas las imágenes rodadas eran reales, rumor que se extendería en todo el mundo, cosa que creó una gran expectación y que acrecentó la fama del filme, pero cada vez sus detractores crecían por legiones mientras que los propios productores utilizaban esos rumores para promocionar la película.

Mientras que posteriormente un nuevo rumor, por parte de un indígena que participó en el filme comentó que durante el rodaje murió un hombre de su tribu devorado por las pirañas y que tal hecho fue grabado por el equipo sí que hicieran el más mínimo esfuerzo por intentar salvar su vida, pero no hay pruebas de que tales imágenes existan.

A pesar de que con el tiempo Deodato logró aclarar que todo lo que había rodado era falso y todas las personas que participaban en la película eran actores contratados tuvo que reconocer que las imágenes de muertes de animales eran reales y que eran los propios actores quienes los mataban, como reconoció el actor Carl Gabriel Yorke. Este mismo actor reconoció en otra anécdota que la actriz Francesca Ciardi se ofreció para rodar las escenas en las que se suponían que hacían el amor sus personajes, pero Yorke se negó porque pensaba que era incomodo tener que rodar esa escena en plena selva, escena que se rodaría semanas después en un estudio de forma posterior al resto del metraje y que según él, por eso Sciardi se mostraba tan desmotivada.

Lo que sí queda claro es que “Holocausto Canibal” es un filme que ha pasado a la historia del cine, quizás no por sus propios meritos pero se ha hecho un lugar en la cultura popular. Para el recuerdo quedará toda la polémica, las brutales escenas de asesinatos, torturas, violaciones y ante todo las empalaciones. Algunos la crítican como puro infracine trash, mientras que otros creen que la película es un autentico trabajo de antropología. Pero en fin, yo aun sigo mirando está película como aquel niño de 10 años que miraba angustiado la portada de reojo cada vez que pasaba cerca de la estantería en el videoclub.