Borat vs. Azamat.

Tras un par de posts hablando sobre clásicos del cine “trash” esta semana vuelvo hablando de una película del año pasado y por primera vez en la historia de “Grotesco! Bizarro! Extremo!” hablamos de una película con grandes medios. Se trata del filme “Borat” dirigida el año pasado por Larry Charles y protagonizado por el cómico británico Sacha Baron Cohen, conocido por su popular personaje televisivo Ali G, con el cual protagonizó su primer éxito cinematográfico “Ali G anda suelto”.

El personaje de Borat también pertenece al “El show de Ali G”, y este filme vuelve a ser otra adaptación a la gran pantalla de uno de sus personajes. Mientras que Baron Cohen esta preparando otra nueva adaptación con su tercer y menos popular personaje, Bruno, un experto en moda austriaco gay que es capaz de mantener las entrevistas más hilarantes con personajes de ese mundillo.

Vayamos al meollo, el filme “Borat” no es más que un falso documental en la que se nos narra el viaje de Borat (Sacha Baron Cohen) a Estados Unidos, con la misión de grabar un documental sobre el estilo de vida americano para que las puedan adoptar sus compatriotas de la gloriosa nación de Kazajstán. Lo que se suponía que se iba a tratar de un viaje de un par de semanas en la gran metrópolis de Nueva York se transforma en un viaje en el que atravesará todo el país para encontrar a su amor platónico, Pamela Anderson (a la que descubre viendo en el hotel “Los vigilantes de la playa”), todo ello sin el beneplácito de su productor Azamat (Ken Davitian). El viaje ayudará a Borat a comprender el estilo de vida americano bajo su inocente y particular punto de vista.

Este estúpido y delirante planteamiento da escena a la escena por la que merece estar incluida esta película en esta sección: el brutal combate entre Azamat y Borat. Borat entra en la habitación que comparten en un lujoso hotel ambos y descubre a su compañero de penurias masturbándose mirando la guía de “Los vigilantes de la playa” (guía que consigue en una delirante escena), ello hace que nuestro heroe pile un cabreo monumental al ver como su amor platónico es objeto de los más bajos (literalmente) instintos de Azamat.

La escena es realmente grotesca y burda, observando a ambos luchadores desnudos enfrentándose en una brutal pelea que lleva a las más delirantes escenas como el momento en el que parece que realicen el 69 con el culo y las pelotas del adorable Azamat restregándose por el bigote de Borat. Y no hay nada que decir de la cara de todas las personas del hotel con las que se encuentran, que obviamente no sabían que realmente todo lo que estaban viendo formaba parte de una película (de ahí la brutal actuación del personal de seguridad del hotel). Aunque hay otra escena que merece ser mencionada, la escena en que compran un pequeño oso grizzlie (para usarlo como perro guardian ante el posible ataque de un grupo de judíos) al que llevan detrás de su furgoneta y el cual deja esta parte llena de mierda, que posteriormente no limpiaran incluso cuando el oso se escapa.

La película esta rodada como un falso documental, la mayoría de escenas están rodadas con el consentimiento de todos los personajes, aunque en el algunos casos los entrevistados creyeron que el serían objeto de un documental que únicamente se vería en Bielorrusia por ello actúan de una forma tan bestial como el caso de los chicos de la Fraternidad con los que se encuentra en su camino (de hecho demandaron a Larry Charles al verse ridiculizados al mostrarlos totalmente borrachos y diciendo todo tipo de burradas).

Y obviamente una película nacida así ha dado mucha polémica: ha sido acusada de ser antisemita (cabe recordar que Sacha Baron Cohen es judío); varias asociaciones de Kazajstán han denunciado a la película por mostrar a tan noble pueblo como gente que parece que aun viva en el medievo; varias de las personas que han aparecido la han denunciado al ver que las condiciones del contrato eran supuestamente falsas. Pero el caso es que de forma inexplicable Borat rompió la taquilla en Estados Unidos y Europa, logrando ser uno de los filmes más taquilleros del año pasado y considerado por muchos como una autentica obra maestra y renacimiento de la comedia más ingeniosa, mientras que para otros no es más que una frikada y excéntrica película que no hace más que ensuciar el buen nombre de la palabra Cine.